Cuando se trata de un cambio de revestimientos exitoso, la eficiencia de la tarea no solamente gira en torno a la finalización. Hay un mundo de análisis de datos antes, durante y después del cambio de revestimientos que se ha aceptado como norma común. Se trate de calcular el diagrama de procesos y recursos, dar seguimiento a la ejecución, estimar el plazo final, seleccionar el revestimiento correcto para el molino, evaluar situaciones ideales y la secuencia de los revestimientos, o incluso de planificar ante contingencias, el dedicar tiempo anticipadamente ayuda a mitigar posibles tiempos de inactividad y contribuye a las iniciativas de optimización.
Vivir en un mundo digital significa que todo se puede analizar si se han recopilado los datos correctos. Cuando los datos se combinan con conocimientos adecuados, se pueden identificar oportunidades de mejora y trazar cursos de acción más eficientes para lograr una situación ideal, y para cuando circunstancias imprevistas plantean un cuello de botella en la ecuación.
Seguridad garantizada durante la parada del equipo
Garantizar la seguridad del personal durante la parada del equipo sigue siendo un reto importante en cualquier tarea de cambio de revestimientos de los molinos en los sitios mineros. Manipular y maniobrar piezas pesadas, como los revestimientos nuevos y los gastados, representa una constante preocupación por la seguridad de los miembros del equipo que se encargará de la instalación. El retiro y manipulación de los revestimientos de molino gastados requiere herramientas adecuadas, así como personal capacitado para utilizarlas de la manera correcta. Los programas de manejo de herramientas y las inspecciones son vitales para garantizar la seguridad. Las inspecciones periódicas con listas de tareas, el uso de los accesorios de seguridad adecuados, el funcionamiento correcto de los equipos, la disponibilidad de herramientas de reserva y una capacitación estandarizada para el personal deben ser aspectos fundamentales tanto antes como durante el cambio de revestimientos.
Un desafío que a menudo se pasa por alto en este tipo de actividades es la seguridad psicológica del personal que realiza el cambio. El cambio de revestimientos puede ser una actividad extremadamente peligrosa, en particular para trabajadores nuevos o para aquellos que no tienen que realizar esta tarea con frecuencia. Las paradas imprevistas por problemas de seguridad o por accidentes pueden resultar costosas tanto para la mina como para el personal. Por esto, las empresas suelen centrar su atención en determinar cómo pueden evitar por completo los accidentes o mitigar sus efectos si llegara a ocurrir un imprevisto. Las soluciones van desde tener expertos en puestos designados y capacitaciones cruzadas con técnicos nuevos hasta entablar conversaciones periódicas para mantener y reforzar la seguridad. En este tipo de situaciones, en las que cada minuto cuenta, el monitoreo permanente del entorno y las evaluaciones de salud mental de los equipos de cambio de revestimientos contribuyen a garantizar que el personal regrese a casa sin sufrir daños.